[ESCENARIO] AUSTERIDAD Y VANGUARDIA MARCARON EL DISEÑO DE LOS ESCENARIOS DE LA JMJ MADRID 2011
Madrid, 23 Ago. 11 (MUNDOARK).- La Jornada Mundial de la Juventud se ha vuelto con los años un evento que ha despertado cada vez un mayor interés y es seguido por millones de personas de todo el mundo sin contar las cantidades de jóvenes que viajan al país elegido para experimentar plenamente el acontecimiento que tiene como puntos cumbres los encuentros con el Papa.
Por unos días, millones de ojos de todo el mundo estuvieron pendientes de lo que ocurría en Madrid, especialmente sobre los escenarios dispuestos para los encuentros. Seguramente a más de un arquitecto le encantaría una vitrina tan grande para exponer su trabajo, aunque por lo mismo podría ser estresante el peso de la responsabilidad que conlleva, pero el reconocido arquitecto español Ignacio Vicens tenia la tranquilidad que le da la experiencia de 30 años de trabajo diseñando los escenarios para todas las visitas papales a España desde 1982, además de hacerlo para la familia real, entre otros.
Vicens diseño los 2 escenarios de la jornada, ambos muy austeros, sencillos, muy fáciles de montar y desmontar y basados en una sistema modular, sin embargo también son modernos y vanguardistas, en ellos se busco la comodidad del Papa, que además, por su diseño austero, resaltan su figura protagónica en el lugar. El color de ambos escenarios es blanco ya que ofrecía la posibilidad de hacer proyecciones y juegos de luces.
“En el caso de Cibeles hemos intentado respetar el marco de la plaza del Cibeles, con el Palacio de Correos de fondo; y en el caso del Aeródromo de Cuatro Vientos hemos creado un espacio singular: una especie de superficie de 200 metros con una gran montaña donde se situará el Santo Padre bajo la sombra de un árbol metálico; y con otros relieves donde se situarán los jóvenes o el Coro y la Orquesta de la Jornada Mundial”, ha explicado Vicens.
Otro detalle fue la subida a los 2 escenarios por medio de una amplia rampa, con ello se busco eliminar la necesidad de barandas ya que al caminar por el centro, por sus amplias dimensiones, no habría ningún peligro de caídas o sensaciones de vértigo.
El arquitecto Vicens también diseño los 200 confesionarios situados en el parque del retiro que en juego con el escenario tenían la forma de las velas de windsurf.
Vicens es experto en lo relacionado a la arquitectura efímera como la decoración de la catedral en la que se celebró la boda de los Príncipes de Asturias entre otros varios trabajos.
"Es cierto que estos trabajos han sido importantes, sobretodo, en términos personales. Tratar a Su Santidad o a la Familia Real es siempre un privilegio. Curiosamente el tema de mi tesis fue Arquitectura Efímera Barroca. Creo que fue la primera sobre el tema en España", explicó el propio arquitecto en una de sus entrevistas.
El arquitecto Vicens concedió una breve entrevista, antes del inicio del evento, sobre su trabajo a la página católica “jóvenes cristianos en acción” que estuvo cubriendo todo lo relacionado al evento de la JMJ, a continuación la reproducimos:
—No es la primera vez que le encargan el diseño de los escenarios del Papa...
—He hecho todos los escenarios del Papa desde la visita de Juan Pablo II en 1982. Recién acababa la carrera. Hice el estrado del encuentro del Papa con los jóvenes en el Santiago Bernabéu, que fue un acto absolutamente maravilloso. Desde entonces el cardenal se ha acordado de mí siempre. También hice los distintos estrados de Colón y de Cuatro Vientos, durante la visita de Juan Pablo II en 2003. Es una satisfacción para mí que el cardenal siga confiando en mí.
—¿Cómo vive la experiencia?
—Creo que es un gran desafío en muchos sentidos. Primero porque las circunstancias son siempre distintas porque lo de Colón no tiene nada que ver con lo de Cibeles o Cuatro Vientos. Los requerimientos también son diferentes, y sobre todo porque todo es una arquitectura que hay que hacer en muy poco tiempo y con pocos medios. Por eso, una de las cosas que más me sorprenden son ese tipo de críticas que se hacen a veces a los «dispendios» de la Iglesia en este tipo de estructuras. La gente debería saber que todo esto se hace con la décima parte de lo que cuesta cualquier concierto de rock y con estructuras básicamente prefabricadas que ya hay en el mercado. De modo que todo este tema del dispendio es algo evidentemente ideológico. No es objetivo.
—¿Cuántas personas están trabajando en Cibeles?
—En Cibeles empezamos la madrugada del domingo 24 de julio y estamos trabajando por las noches para molestar menos. Ahora ya se ve la base de toda la estructura. Solamente para el vallado y acopio del material fueron necesarias 40 personas. Se va contratando gente en función de los elementos. Al final es mucha gente la que se va sumando sucesivamente sin parar. Esto hay que hacerlo en unos plazos récords para interrumpir lo menos posible la vida ciudadana. En Cuatro Vientos, en cambio, empezamos hace ya más de un mes. Fue complicado el replanteo, ya que en aquellos 200 metros que parecían horizontal, en realidad, hay una diferencia de casi metro y medio de altura. La estructura está prácticamente terminada. Queremos finalizar la obra la próxima semana para que empiece toda la instalación de sonido, iluminación y para que haya tiempo para los ensayos. Vamos bien, teniendo en cuenta que trabajamos día y noche.
—Su trabajo se luce mucho...
—Supongo que habrá gente a la que no le guste mucho, pero el éxito mayor sería que el Papa no lo notara. Eso quiere decir que todo ha salido muy bien, que no le ha dado el sol, que no ha pasado calor, que su mensaje ha llegado a todo el mundo. Si no se nota quiere decir que todo ha salido bien. Cuando se nota demasiado es casi siempre por los elementos negativos.
—Hay que tener una sensibilidad especial para hacer este trabajo
—No lo sé, personalmente me encuentro extraordinariamente a gusto con todo esto. No es la primera vez que lo hago, además he hecho muchas iglesias también. Soy católico y tengo una sensibilidad especial para todo esto, vibro con ello. Por otra parte, es divertido pensar que mi tesis doctoral la hice sobre arquitectura efímera. Luego he tenido que hacer mucha arquitectura de este tipo, como la boda del Príncipe.
A continuación puedes ver el video de esta publicación:
Paginas consultadas:
- http://www.antena3.com/especiales/noticias/sociedad/visita-papa/anos-disenando-escenarios-papa-espana_2011081400048.html
- http://www.jovenescristianosenaccion.com/noticia.php?id_not=994
- http://madrid11.com/es/noticias/1357-escenarios
Por unos días, millones de ojos de todo el mundo estuvieron pendientes de lo que ocurría en Madrid, especialmente sobre los escenarios dispuestos para los encuentros. Seguramente a más de un arquitecto le encantaría una vitrina tan grande para exponer su trabajo, aunque por lo mismo podría ser estresante el peso de la responsabilidad que conlleva, pero el reconocido arquitecto español Ignacio Vicens tenia la tranquilidad que le da la experiencia de 30 años de trabajo diseñando los escenarios para todas las visitas papales a España desde 1982, además de hacerlo para la familia real, entre otros.
Vicens diseño los 2 escenarios de la jornada, ambos muy austeros, sencillos, muy fáciles de montar y desmontar y basados en una sistema modular, sin embargo también son modernos y vanguardistas, en ellos se busco la comodidad del Papa, que además, por su diseño austero, resaltan su figura protagónica en el lugar. El color de ambos escenarios es blanco ya que ofrecía la posibilidad de hacer proyecciones y juegos de luces.
“En el caso de Cibeles hemos intentado respetar el marco de la plaza del Cibeles, con el Palacio de Correos de fondo; y en el caso del Aeródromo de Cuatro Vientos hemos creado un espacio singular: una especie de superficie de 200 metros con una gran montaña donde se situará el Santo Padre bajo la sombra de un árbol metálico; y con otros relieves donde se situarán los jóvenes o el Coro y la Orquesta de la Jornada Mundial”, ha explicado Vicens.
Escenario en Cuatro Vientos
El escenario de Cibeles asemeja la forma de una ola lo cual fue tan bien percibido por los asistentes el primer día de la Jornada que hasta se improviso el coro: "Este Papa cómo mola (gusta) se merece una ola". Además, como un gran detalle tuvo de fondo una gran imagen de la Virgen de la Almudena.
Debido al intenso calor que se sabia tendría España en estas fechas se instalaron en ambos escenarios unos estores y aspersores de agua para minimizar un poco las altas temperaturas, en Cibeles estaban instalados en el techo del escenario, en cuatro vientos se opto por colocar un mecanismo que pulveriza agua en la representación del árbol en el escenario.
Otro detalle fue la subida a los 2 escenarios por medio de una amplia rampa, con ello se busco eliminar la necesidad de barandas ya que al caminar por el centro, por sus amplias dimensiones, no habría ningún peligro de caídas o sensaciones de vértigo.
El arquitecto Vicens también diseño los 200 confesionarios situados en el parque del retiro que en juego con el escenario tenían la forma de las velas de windsurf.
Vicens es experto en lo relacionado a la arquitectura efímera como la decoración de la catedral en la que se celebró la boda de los Príncipes de Asturias entre otros varios trabajos.
"Es cierto que estos trabajos han sido importantes, sobretodo, en términos personales. Tratar a Su Santidad o a la Familia Real es siempre un privilegio. Curiosamente el tema de mi tesis fue Arquitectura Efímera Barroca. Creo que fue la primera sobre el tema en España", explicó el propio arquitecto en una de sus entrevistas.
El arquitecto Vicens concedió una breve entrevista, antes del inicio del evento, sobre su trabajo a la página católica “jóvenes cristianos en acción” que estuvo cubriendo todo lo relacionado al evento de la JMJ, a continuación la reproducimos:
—No es la primera vez que le encargan el diseño de los escenarios del Papa...
—He hecho todos los escenarios del Papa desde la visita de Juan Pablo II en 1982. Recién acababa la carrera. Hice el estrado del encuentro del Papa con los jóvenes en el Santiago Bernabéu, que fue un acto absolutamente maravilloso. Desde entonces el cardenal se ha acordado de mí siempre. También hice los distintos estrados de Colón y de Cuatro Vientos, durante la visita de Juan Pablo II en 2003. Es una satisfacción para mí que el cardenal siga confiando en mí.
—¿Cómo vive la experiencia?
—Creo que es un gran desafío en muchos sentidos. Primero porque las circunstancias son siempre distintas porque lo de Colón no tiene nada que ver con lo de Cibeles o Cuatro Vientos. Los requerimientos también son diferentes, y sobre todo porque todo es una arquitectura que hay que hacer en muy poco tiempo y con pocos medios. Por eso, una de las cosas que más me sorprenden son ese tipo de críticas que se hacen a veces a los «dispendios» de la Iglesia en este tipo de estructuras. La gente debería saber que todo esto se hace con la décima parte de lo que cuesta cualquier concierto de rock y con estructuras básicamente prefabricadas que ya hay en el mercado. De modo que todo este tema del dispendio es algo evidentemente ideológico. No es objetivo.
—¿Cuántas personas están trabajando en Cibeles?
—En Cibeles empezamos la madrugada del domingo 24 de julio y estamos trabajando por las noches para molestar menos. Ahora ya se ve la base de toda la estructura. Solamente para el vallado y acopio del material fueron necesarias 40 personas. Se va contratando gente en función de los elementos. Al final es mucha gente la que se va sumando sucesivamente sin parar. Esto hay que hacerlo en unos plazos récords para interrumpir lo menos posible la vida ciudadana. En Cuatro Vientos, en cambio, empezamos hace ya más de un mes. Fue complicado el replanteo, ya que en aquellos 200 metros que parecían horizontal, en realidad, hay una diferencia de casi metro y medio de altura. La estructura está prácticamente terminada. Queremos finalizar la obra la próxima semana para que empiece toda la instalación de sonido, iluminación y para que haya tiempo para los ensayos. Vamos bien, teniendo en cuenta que trabajamos día y noche.
—Su trabajo se luce mucho...
—Supongo que habrá gente a la que no le guste mucho, pero el éxito mayor sería que el Papa no lo notara. Eso quiere decir que todo ha salido muy bien, que no le ha dado el sol, que no ha pasado calor, que su mensaje ha llegado a todo el mundo. Si no se nota quiere decir que todo ha salido bien. Cuando se nota demasiado es casi siempre por los elementos negativos.
—Hay que tener una sensibilidad especial para hacer este trabajo
—No lo sé, personalmente me encuentro extraordinariamente a gusto con todo esto. No es la primera vez que lo hago, además he hecho muchas iglesias también. Soy católico y tengo una sensibilidad especial para todo esto, vibro con ello. Por otra parte, es divertido pensar que mi tesis doctoral la hice sobre arquitectura efímera. Luego he tenido que hacer mucha arquitectura de este tipo, como la boda del Príncipe.
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- http://www.jovenescristianosenaccion.com/noticia.php?id_not=994
- http://madrid11.com/es/noticias/1357-escenarios
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